Regional | 01/07/2025 20:14:59

MARCHA ANTITAURINA EXIGE JUSTICIA TRAS MASACRE ANIMAL EN CHUMBIVILCAS

Lilián Luna

Código Penal Peruano: sanciones benignas por tortura animal.

   

 
 
#CuscoDatos. La provincia de Chumbivilcas se ha convertido en el epicentro de una polémica nacional tras la masacre de toros y caballos durante los festejos por su bicentenario. En respuesta, este viernes 4 de julio a las 15:00 horas, colectivos animalistas y ciudadanos se congregarán en la plaza Túpac Amaru de Wanchaq para la marcha antitaurina "Defendamos la Vida", bajo consignas como "¡No a la tauromaquia!", "¡No más violencia!" y "¡Tortura no es arte ni cultura!". FISCALÍA EN LA MIRA El presidente de la Junta de Fiscales del Cusco, Manuel Mayorga Zárate, reconoció que antes de la crueldad animal, la Fiscalía de Prevención del Delito solo supervisó la seguridad del evento taurino, sin actuar para evitar el sufrimiento animal. "No se advirtieron estos hechos a tiempo", admitió Mayorga, quien confirmó que la fiscal Estefany Conde Triveños lidera la investigación por el presunto delito de abandono y crueldad animal contra el alcalde provincial José Alberto Flores Cruz. INVESTIGACIÓN EN EXPANSIÓN Mayorga acotó que el caso podría extenderse a más implicados, dependiendo del avance de las pesquisas. Se dispuso una investigación preliminar de 60 días, prorrogable, para determinar responsabilidades. Los hechos ocurridos en la plaza de toros 'Santo Tomás' —donde participaron toreros extranjeros— han generado repudio en redes sociales, con usuarios denunciando la "normalización de la violencia". SANCIONES El artículo 206-A del Código Penal, incorporado por la Ley 30407 de Protección Animal, castiga los actos de crueldad con penas de hasta 5 años de prisión y multas, pero activistas critican su escasa severidad: "Estas sanciones son benignas para crímenes que involucran sufrimiento innecesario y muerte. DATO CLAVE La marcha busca no solo visibilizar el caso de Chumbivilcas, sino presionar por una reforma legal que prohíba prácticas taurinas en el Perú, alineándose con estándares internacionales de bienestar animal. Mientras, la Fiscalía del Cusco enfrenta el reto de demostrar que la justicia no es selectiva cuando las víctimas no humanas claman desde el ruedo.